Sifilis: Causada por la bacteria Treponema pallidumse caracteriza por presentar desde lesiones iniciales en los genitales hasta complicaciones más graves si no se trata adecuadamente.
El primer signo de sífilis suele ser una llaga indolora llamada chancro, que aparece en el área genital, anal o bucal. Esta lesión puede curarse espontáneamente, pero la infección persiste en el cuerpo si no se trata con antibióticos, lo que lleva a la segunda etapa de la enfermedad. Durante esta fase, pueden aparecer erupciones cutáneas y síntomas similares a los de la gripe. Si no se trata en esta etapa, la sífilis puede entrar en una fase latente y permanecer en el organismo durante años sin causar síntomas aparentes.
La sífilis no tratada puede avanzar a una etapa más grave conocida como sífilis terciaria, que puede afectar gravemente órganos internos como el corazón, el cerebro y los nervios. En esta fase, los síntomas pueden incluir daño cerebral, problemas cardíacos, ceguera y otros problemas de salud graves.
La buena noticia es que la sífilis es tratable con antibióticos, especialmente en sus primeras etapas. El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado son esenciales para prevenir complicaciones a largo plazo. Se recomienda realizar pruebas de detección de sífilis, especialmente para aquellos que tienen múltiples parejas sexuales o están en riesgo de contraer ITS.